El título que hoy tenemos entre manos es fruto de la colaboración entre HeadUp Games (el desarrollador) y de Team Meat y los artistas originales de Super Meat Boy. Dr. Fetus’ Mean Meat Machine es una ingeniosa mezcla de los rompecabezas clásicos con los intensos elementos plataformeros que hicieron famoso a Meat Boy. Con una esencia inspirada claramente en Puyo-Puyo, este juego es un giro de tuerca al género de puzles y nos lleva de la mano a recorrer lugares ya conocidos de Super Meat Boy y Super Meat Boy Forever como el pintoresco bosque, el hospital y Salt Factory.
¿Estará a la altura de sus incombustibles predecesores? Ya os adelantamos que no. Dr. Fetus’ Mean Meat Machine es una propuesta original y atrevida pero demasiado arriesgada que no está hecha para todos los públicos.
Dr. Fetus’ Mean Meat Machine y su contexto
La historia que cuenta Dr. Fetus’ Mean Meat Machine (si es que cuenta alguna) ocurre tras los sucesos de Super Meat Boy Forever. El jugador asumirá en esta ocasión el papel del malvado Dr. Fetus que, después de analizar meticulosamente a Meat Boy, obtiene toda la información necesaria para crear al clon definitivo. Solo hay un problema: la muestra de ADN que recogió no está en perfecto estado, así que los clones que está creando son algo defectuosos. Para resolver el problema, el Dr. Fetus creará un montón de cámaras de pruebas despiadadas para llevar allí a los clones y separar a la chusma de los dignos. En un primer momento, los especímenes no se parecen nada a Meat Boy, pero poco a poco empiezan a evolucionar hasta convertirse en su archienemigo más temido.
Como veréis, aunque mantiene una estética fiel y coherente con la obra original, el contexto histórico no es más que una mera excusa para poner ante el jugador un desafiante puzle que hará que se tire de los pelos en más de una ocasión.
Mecánicas trilladas pero con algún giro inesperado
La mecánica principal del juego la hemos visto en mil y una ocasiones. Consiste en colocar las piezas que van cayendo desde la parte superior del escenario y colocarlas debajo, agrupándolas por colores para poder eliminarlas. En esta ocasión las fichas se componen de dos clones defectuosos de diferentes colores que habrá que juntar con los de su mismo color para borrarlos del mapa. Cuando hayamos juntado al menos cuatro clones iguales habremos hecho una cadena y estos se destruirán. No hace falta juntarlos en línea, vale tan solo con que sean contiguos y estén en contacto.
A medida que vamos avanzando en los escenarios iremos desbloqueando otras criaturas y descubriendo nuevas mecánicas que dan al título bastante variedad. Pero claro, esto no es todo. Mientras avanzamos se van activando numerosas trampas que van a complicarnos la misión de forma considerable.
En Dr. Fetus’ Mean Meat Machine nos enfrentaremos a más de 100 niveles repletos de trampas mortales cuyo dificultad va en aumento constantemente…y eso que la cosa empieza a torcerse pronto. Por si fuera poco, para pasar de mundo deberemos superar una cierta cantidad de fases para poder enfrentarnos a un jefe final con mecánicas nuevas que nos pondrá las cosas aún más difíciles.
Dificultad exagerada desde el comienzo
Es un juego extremadamente difícil. No solo basta con colocar las fichas en su sitio sino que deberemos de hacerlo con habilidad y en el menor tiempo posible si queremos conseguir la máxima puntuación. Si una trampa daña nuestras piezas mientras las estamos colocando se acabó la partida. Nos toca empezar el nivel desde el inicio o, si hemos sido habilidosos, desde uno de los checkpoints que se desbloquean según nuestros avances.
Esto puede suponer un punto fuerte de frustración para los jugadores poco acostumbrados a los altos retos. Por suerte, los de HeadUp Games han decidido incluir una serie de medidas para facilitar las cosas a los jugadores menos habilidosos. Además de los puntos de control citados nos encontramos en los menús dos opciones de accesibilidad que nos salvarán el pellejo en más de una ocasión. La primera de ellas es la velocidad de caída de las fichas, la cual podemos “trucar” para hacer que todo vaya más despacio y proporcione al jugador más tiempo para pensar. La otra es, directamente, la invencibilidad. Es una opción claramente orientada a aquellos jugadores que sólo quieren disfrutar de una experiencia de puzle divertida y llamativa, sin complicaciones. Una cosa a tener en cuenta es que si activamos cualquiera de estas ayudas no podremos sacar la máxima puntuación en los niveles.
Apartado artístico y sonoro muy decente
El estilo artístico de Dr. Fetus’ Mean Meat Machine es muy bonito y va muy acorde con la obra original. Nos abriremos camino a través de preciosos mundos hechos a mano y más de 100 niveles llenos de trampas y detalles creativos. Tenemos la suerte de poder disfrutar de paisajes y animaciones deslumbrantes realizados por los artistas originales de Super Meat Boy y Super Meat Boy Forever. Sin duda, un gran detalle que satisfará a los más nostálgicos y a los fieles seguidores de la franquicia.
En cuanto al apartado sonoro, los efectos son pocos pero muy bien conseguidos y contundentes. La banda sonora creada por RIDICULON es un maravilloso remix compuesto por sonidos nuevos y únicos y muchas de las canciones ya conocidas de Super Meat Boy Forever. Antes de que acabe el día nos sorprenderemos tarareando una y otra vez alguna que otra canción ya que resultan muy pegadizas.
Conclusiones sobre Dr. Fetus Mean Meat Machine
Dr. Fetus Mean Meat Machine no es un juego para todo el mundo. Resulta interesante, ya que mezcla dos conceptos que a priori no casan demasiado, como son los puzles y la acción frenética. No obstante, creo que tiene fallos de diseño que podrían haberse subsanado dándole alguna otra vuelta. Para conseguir las marcas A+ deberemos completar el nivel en el menor tiempo posible. Esto es directamente contrapuesto a un formato de juego donde para poder avanzar de forma segura debemos ir despacio y pensando cada movimiento. No acabo de encajar bien estos dos factores.
Además, la dificultad llega a ser tan extrema en escenarios avanzados que muchos jugadores acabarán por abandonarlo. Sin ir más lejos, a pesar de que hemos logrado alcanzar los últimos niveles, en la redacción de Área Xbox no hemos podido llegar a completarlo del todo.
No es el mejor juego de puzles que hay pero es entretenido. Su propuesta de diversión es sencilla, va directa al grano y no se anda con rodeos. Es un título de acción directa que te plantea lo que tiene desde el principio. Es ideal para partidas cortas o como juego de relleno entre sesiones de juegos de mayor peso. Lo mejor es que Dr. Fetus’ Mean Meat Machine tiene un precio reducido y puede ser un caramelito para los que quieran darle un tiento.
Acerca del autor
Gamer desde los 80. Amante de los animales y el buen cine. Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas. A veces salgo en películas por detrás.